En la provincia de Tavush, Armenia, el Programa Shuttle de Acción contra el Hambre ha ayudado a familias refugiadas y miembros de la comunidad de acogida a desarrollar sus competencias y apoyar sus medios de vida.
El alto el fuego se ha violado miles de veces. Desde su entrada en vigor, el Líbano ha sido testigo de ataques con drones e incursiones aéreas casi diarios.
Casi un año después de que se acordara el alto el fuego, muchos agricultores del sur del Líbano siguen sin poder acceder a sus tierras debido al desplazamiento, los continuos ataques israelíes y la contaminación del suelo.
Acción contra el Hambre, financiada por el Fondo Humanitario para Siria (SHF), ha proporcionado ayuda en efectivo a familias de Siria que tienen miembros con discapacidad. La familia de Samaher era una de ellas.
Fuimos una de las primeras organizaciones en pisar la zona cero y, doce meses después, seguimos donde dijimos que estaríamos: en todos los municipios valencianos afectados.
Todo cambió cuando Acción contra el Hambre, con el apoyo de la AECID, puso en marcha un programa de formación para ayudar a mujeres a aprender técnicas de procesamiento de alimentos, cómo hacer queso, encurtidos y mucho más.
El marido de Aling murió en un conflicto comunal. A los 32 años, Aling se encontró sola, con la responsabilidad de criar a sus hijos sin ningún tipo de apoyo.
Cuando el tifón Kristine azotó Barobaybay, en Camarines Sur, Nanay Carmen, de 76 años, se enfrentó a la crecida de las aguas. Acción contra el Hambre le proporcionó kits de higiene y agua esenciales.
A pesar del acuerdo de alto el fuego de hace seis meses, en noviembre de 2024, en el Líbano, la actividad militar sigue siendo intensa. Más de un millón de personas pasan hambre en el Líbano en medio de la inestabilidad.