El proyecto se implementará en Madrid, Cataluña, Comunidad Valenciana y Navarra, y apuesta por un enfoque integral, intercultural y participativo para construir escenarios profesionales más justos y equitativos.
“Llegué a instalarme en la casa de mi abuela y decidí que no me quería ir. Quería vivir aquí, rodeada de naturaleza, sin el ruido de todos los coches… Tenía que buscar la manera de quedarme”,