Evitar enfermedades infecciosas es el principal objetivo del equipo de emergencias que trabaja en las zonas afectadas
EMERGENCIA DANA VALENCIA
- El equipo de emergencias de Acción contra el Hambre está trabajando intensamente en municipios de Valencia para prevenir infecciones por agua estancada, con la ayuda de sus técnicos especialistas en agua, saneamiento e higiene.
- El peligro de infecciones por agua estancada aumenta significativamente a partir de las 72 horas. Entre las enfermedades preocupantes se encuentran gastroenteritis bacterianas, hepatitis A y enfermedades transmitidas por mosquitos.
- La organización ha puesto en marcha plantas de extracción de lodo y bombas de achique de agua y ha instalado sacas industriales de escombro.
Acción contra el Hambre está, desde el pasado jueves, activa en varios municipios de Valencia, respondiendo a la emergencia con actividades de agua, saneamiento e higiene. La organización está centrada en el control de vectores para mitigar los riesgos de infección mediante la distribución de kits de limpieza compuestos por capazos, cepillos, palas y escobones, bolsas de basura, guantes de limpieza y manipulación de residuos, estropajos, bayetas, toallitas, lejía, pastillas de jabón, jabón de manos. También ha repartido linternas, chalecos reflectantes y comidas.
Los expertos en agua, saneamiento e higiene de la organización han realizado un diagnóstico inicial junto con la Unidad Militar de Emergencia y los ayuntamientos locales para detectar necesidades en este ámbito. “Nos estamos encontrando lodos y fangos en los pueblos afectados en los que se acumulan enseres, basura y restos biológicos. La propias vecinas y vecinos, según están limpiando, sacan enseres de las casas, pero desde los ayuntamientos se recomienda que esos lodos no se viertan al sistema de alcantarillado porque puede terminar bloqueándose y aflorando aguas negras a la superficie, lo que puede suponer un riesgo de salubridad”, explica la experta en agua, saneamiento e higiene de Acción contra el Hambre, Fátima González, que se encuentra en el terreno. “Se recomienda medidas de seguridad personales como el uso de guantes y el lavado de manos frecuente para tratar de prevenir infecciones gastrointestinales”, añade.
El peligro de infecciones por agua estancada aumenta significativamente a partir de las 72 horas, y esta acumulación puede generar condiciones favorables para la proliferación de patógenos, vectores como mosquitos y roedores. Además, existe riesgo de contaminación del agua potable si se mezcla con aguas residuales. Entre las enfermedades preocupantes se encuentran las gastroenteritis bacterianas, hepatitis A o enfermedades transmitidas por mosquitos, entre otras.
El trabajo de Acción contra el Hambre en agua, saneamiento e higiene
Por ello, Acción contra el Hambre está realizando una evaluación de gestión de residuos sanitarios e instalando y distribuyendo sacas industriales de escombro en Massanassa para verter de forma segura el barro extraído de las viviendas y garajes para evitar que se acumule en las calles.
La organización también ha puesto en marcha dos plantas de extracción de lodo y ha preparado el envío de bombas de achique de agua y más material de emergencia con el objetivo de prevenir posibles infecciones derivadas del lodo acumulado y otros riesgos sanitarios. Se espera que, a lo largo del día de hoy, se instalen 17 plantas más de extracción de lodo y agua.
Por otra parte, también ha previsto un análisis de necesidades de energía (gasolina, diésel, etc.), la movilización de bombas de achique de agua a nivel doméstico adicionales, la instalación de puntos de lavado de manos, así como actividades de sensibilización para el control de enfermedades infecciosas.