Contexto humanitario
En 2023, Zimbabue presentaba un contexto humanitario frágil, con más de 1,5 millones de personas necesitadas de ayuda, de las que más de un millón eran niños. El ingreso medio de los hogares pasó de 75 a 57 dólares al mes, lo que generó inestabilidad económica. Además, ésta se vio agravada por desastres climáticos y peligros naturales, a los que Zimbabue está expuesto de forma crónica.
Tras medidas gubernamentales, la inflación se desaceleró en 2023, pero la deuda del país aún representa el 66% del PIB, y la desigualdad y la pobreza permanecen. El país también enfrenta una epidemia de cólera, con más de 13.000 casos sospechosos o confirmados y más de 150 muertes sospechosas o confirmadas hasta noviembre de 2023.
BENEFICIARIOS
trabajadores
Nuestra actividad
En Zimbabue, Acción contra el Hambre ha llevado a cabo grandes proyectos destinados a reforzar los sistemas que habían diseñado las comunidades de varias provincias para mitigar el impacto de las largas sequías, la crisis económica y la COVID-19 en la seguridad alimentaria e hídrica. A través de estas iniciativas, se entregó dinero a cambio de trabajo, se impartieron formaciones y se distribuyeron insumos para realizar actividades agrícolas y ganaderas, rehabilitar infraestructuras hídricas y promover la higiene.
Junto con su socio Nutrition Action Zimbabwe (NAZ), Acción contra el Hambre puso en marcha el proyecto piloto Farming with Alternative Pollinators (Cultivar con polinizadores alternativos, FAP por sus siglas en inglés). El objetivo era ensayar iniciativas que fueran prácticas y asequibles que permitieran a los pequeños agricultores sacar más ganancias de sus cultivos y, al mismo tiempo, preservar la diversidad y el hábitat de los polinizadores.
También comenzamos una intervención para combatir la epidemia de cólera en curso en Bulawayo, gracias a la financiación de la Agencia Sueca de Cooperación para el Desarrollo Internacional.
DÓNDE
AYUDAMOS
Ayudamos a 24,5 millones de personas anualmente. Trabajamos en 55 países de África, Asia, América Latina y Europa, los más amenazados por el hambre.